El ser humano está expuesto, desde que nace, a muchísimas amenazas y peligros, incluso en aquellos lugares desarrollados donde tenemos la fortuna de haber crecido con buenos sistemas sanitaros, agua potable, buena alimentación y todas las ventajas. Nuestro cuerpo tiene que lidiar con amenazas del exterior, desde constipados, gripes y demás virus, a rasguños y golpes. Para evitar que el dolor vaya a más, o que ese virus que ha entrado en nuestro cuerpo nos afecte más de lo debido, nuestro propio organismo se encarga de crear defensas a través del sistema inmunológico, que nos protege de estas amenazas. Es un sistema que todos poseemos, aunque no de la misma forma, ni tampoco en la misma medida.
Mantener nuestro sistema inmunológico en la mejor forma posible es esencial para evitar que cualquier enfermedad nos afecte más de lo debido. Lo estamos comprobando perfectamente en estos días, con toda la pandemia del coronavirus, y es cierto que en tiempos como esto resulta esencial tomar conciencia de la importancia que tiene este tipo de procesos en nuestro organismo. De hecho, podemos cuidarnos mejor y fortalecer nuestro sistema a través de distintos pasos que nos harán tener no solo una vida más sana y equilibrada, sino también una protección más adecuada para enfrentarnos a este tipo de situaciones. Algo que puede suponer la diferencia entre enfermar o seguir sanos, así que no hay que tomárselo a la ligera, ni mucho menos.
Cómo fortalecer el sistema inmune naturalmente
Nuestro sistema inmune está con nosotros casi desde que nacemos, ya que el cuerpo necesita generar esas defensas para defendernos de todos esos agentes externos que pueden dañarnos. Hay muchas formas de lograr fortalecer ese sistema de defensas del organismo, incluso de forma natural, a través de una vida sana y equilibrada, evitando por ejemplo ciertos alimentos que pueden provocar desequilibrios en nuestros niveles de colesterol, por ejemplo, y también sustancias como el alcohol y el tabaco, que indudablemente nos perjudican. Un sistema inmunológico fuerte será capaz de hacer frente a cualquier amenaza que se le presente, y hemos de trabajar duro para conseguir que nuestras defensas estén en todo lo alto, especialmente en épocas como el invierno, donde los virus son más habituales.
Alimentos para fortalecer el sistema inmune
Una de las formas más sencillas para fortalecer nuestro sistema inmunológico es dotar a nuestro cuerpo de todas las vitaminas, minerales y proteínas que necesita para estar más fuerte. Una alimentación equilibrada nos permitirá elevar nuestras defensas de una manera efectiva para que esos virus que pueda haber en el aire no nos pillen, y si lo hacen, poder pasarlo todo más rápidamente. La alimentación es sin lugar a dudas uno de los pilares básicos de nuestra protección orgánica, y por eso es importante entender qué tipo de alimentos son los que necesitamos en todo momento para que las defensas no bajen. Siempre se habla de las frutas y verduras, pero hay mucho más que eso, y de hecho, conviene comer un poco de todo.
Los vegetales son una opción muy buena para mantener altas las defensas, gracias a todo lo que aportan. Hablamos de alimentos como el brócoli o la colifror, que pueden hacerse hervidos, no tienen apenas calorías y son magníficos para mantenernos protegidos. Los alimentos fermentados, como el kéfir, también tienen una curiosa ventaja, y es que ayudan a proteger la flora intestinal, indispensable para mantener fuerte nuestro sistema inmunitario. El coco y su aceite, las frutas cítricas como la naranja y la mandarina, así como la miel y las infusiones de poleo son también alternativas maravillosas para poder aguantar mucho mejor las embestidas que nuestro cuerpo reciba por parte de este tipo de virus. Permanecer fuertes es imprescindible.
Deporte y sistema inmunológico
El sistema inmunológico no solo cambia por nuestra alimentación, sino que también se ve afectado por cualquier cambio, tanto externo como interno. Haber pasado por una temporada de estrés o ansiedad nos puede afectar igualmente y bajar nuestras defensas. Personas que ya tienen una edad también se ven más afectadas por este tipo de dolencias, y no cuentan con tantas defensas. Por eso, una forma de mantenernos protegidos y seguros es hacer deporte y darle al cuerpo ese movimiento que necesita. El ejercicio físico es una actividad indispensable para que nuestro organismo esté realmente sano, tanto por fuera como por dentro, ya que nos sirve no solo para fortalecernos físicamente, sino para dejar atrás problemas y ansiedad.
La práctica deportiva, desde salir a correr un rato hasta ir al gimnasio, pasando por practicar un deporte dos o tres veces por semana, nos ayuda a mantener el organismo activo y fortalecerlo frente a posibles amenazas. Hablamos, eso sí, de ejercicio moderado, el que cualquiera de nosotros puede practicar para mantenerse en forma. De hecho, el ejercicio físico a nivel profesional puede llegar a ser incluso contraproducente, por el simple hecho de estar sometiendo al organismo a un esfuerzo demasiado intenso para el que en muchas ocasiones no está tan preparado. Elige un deporte o una actividad física que te guste y sala practicar, aunque solo sea para estar mejor preparado para cuando vengan este tipo de amenazas.
Cómo fortalecer el sistema inmune rápidamente
Ya hemos visto que la actividad deportiva y la alimentación son dos fórmulas perfectas de alcanzar unas altas defensas inmunológicas. Lo necesario lo tenemos al alcance de la mano, y de hecho, se debería convertir no en una forma de hacernos más fuertes de manera puntual, sino en nuestra rutina tanto de ejercicio como de alimentación. Es cierto que cuando llegan este tipo de amenazas y nos vemos un poco desamparados, hemos de tomar la vía rápida. Podemos prepararnos infusiones de manzanilla y menta poleo, zumos de naranja natural y comer mucha verdura hervida para poder fortalecer rápidamente nuestro sistema inmunológico, y estar perfectamente preparados para hacer frente a todo lo que nos venga con las garantías de que vamos a aguantar.